Con el título “El vampiro en el espejo”, el profesor José Abad, del Departamento de Filologías Románica, Italiana, Gallego-Portuguesa y Catalana de la UGR, ha publicado en la Editorial Universidad de Granada(eug) un ensayo sobre el vampiro y su vinculación con el cine, en el que se analizan cien películas relacionadas con el vampirismo. El libro ofrece, según reza en la contraportada: “un recorrido por la Historia del cine y el análisis exhaustivo de un centenar de películas, entre las cuales hallarán los títulos más famosos sobre el tema, así como un nutrido ramillete de rarezas”.
En 7 capítulos, que ocupan cerca de 300 páginas, el profesor Abad transita por un siglo de cine e indaga cómo ha sido tratado el mito del vampiro por la fábrica de sueños.
Antes, en su introducción de este ensayo, el autor escribe de “Lo que sé de los vampiros” y propone una declaración de intenciones sobre lo que llamamos vampiros, el culto a la sangre, las creencias en monstruos bebedores de sangre, muertos vivos, y toda la cultura histórica que el mito del vampirismo comporta, sin dejar de lado el discurso del doble. Escribe Abad: “Según Gérard Lenne, el tema del doble está en el origen de los grandes monstruos de ficción. No obstante,`la aparición de un doble que catalice las angustias e inquietudes inconscientes solo es en apariencia una multiplicación de la personalidad; en realidad es una división, una partición, un estallido´. De este modo, el vampiro --uno de los iconos más arraigados en el imaginario popular-- se abre a un amplio abanico de sugerencias dependiendo del humus sociocultural en el que aparece”.
De la literatura al cine, el mito se transforma de ficción literaria a ficción cinematográfica y el profesor Abad reflexiona acerca de esta transformación y la peculiaridad del vampiro cinematográfico y los distintos tratamientos que de él han hecho y hacen los múltiples directores de cine que se han aventurado en ese gran universo del bebedor de sangre. Para el autor de este libro, “el vampiro puede representar el pasado que vuelve o que se niega a desaparecer. El rechazo al orden hegemónico o la pervivencia de uno ya periclitado. Es un individuo al margen, en el borde, al otro lado. En él se condensan lo atávico y lo eterno, la pulsión de vida y de muerte, lo prohibido, oculto o silenciado… Y el cine, espejo oblicuo de nuestro tiempo, ha tenido en esta figura una fuente inagotable de ficciones”.
José Abad imparte en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Granada la materia “Cine y Sociedad”.